Se pueden decir mil cosas de Madrid, tanto buenas como malas, como de cualquier otra gran ciudad que se precie. Sin embargo, lo que nunca jamás dirá nadie de la capital de España es que es un sitio aburrido y falto de alternativas. Porque en todo el territorio de la ciudad, sin tener que salir de la M30, encontramos cientos, miles de locales diferentes y especiales, para todos los gustos. Da igual si eres más de tomar unas cañas con unas tapas antes de ir al partido de fútbol, o si prefieres almorzar en un restaurante vegano después de una sesión de yoga balinés. En Madrid puedes encontrar todo el o cio y el entretenimiento que desees, porque es una ciudad tan grande y abierta que tiene lugares para todos los gustos. O casi, porque algunas alternativas ya se han perdido, básicamente por no contar con tanta demanda.

Hace tiempo, en los años 70 y 80, Madrid era una ciudad que lucía orgullosa sus cines para adultos. Las míticas salas X de la ciudad albergaron en su momento estrenos muy importantes, como el de la versión doblada de la mítica Garganta Profunda. Estas mismas salas sirvieron también como indisimulado picadero para muchas parejas, incluso en momentos en los que ir de la mano con cierta persona por la calle podía ser motivo de escarnio público. Las salas de cine porno constituían una parte más de la cultura de la ciudad, aunque poco a poco, su peso fue decayendo hasta desaparecer. Si el cine comercial ya lo tiene difícil, el porno ha quedado relegado, para alivio de muchos, al terreno personal. Con el acceso a Internet de alta velocidad del que todos disfrutamos en casa, ¿qué necesidad hay de pagar una entrada por ver una película en pantalla grande, rodeado en el mejor de los casos de gente con cierta obsesión por el sexo? Los cines porno han ido desapareciendo poco a poco de las grandes ciudades, y en muchos casos, han dado paso a otras alternativas culturales. Así ha ocurrido en Madrid con los Cines Alba, que ahora son la Sala Equis.

Dicen que Nueva York es la ciudad que nunca duerme, pero Madrid no le anda a la zaga. La capital española siempre ha tenido ese punto bohemio y fiestero, incluso en los días entre semana, permitiendo que cualquiera con ganas de pasarlo en grande encuentre siempre un lugar donde disfrutar. Madrid tiene locales y bares para todos los gustos, y su enorme callejero guarda también secretos muy picantes, para aquellos que quieran darle un toque morboso a la noche. Existen todo tipo de locales de moda en la capital que sobresalen por su originalidad, sitios donde podemos escuchar la música que más nos guste. Claro que las discotecas y los pubs de copas predominan para atender a la gran demanda de la mayoría del público. Pero si somos de cambiar el reggeaton y lo latino por música rock, indie o incluso sala y bachata, no tardaremos en encontrar el sitio perfecto para pasar una noche inolvidable.

Salir a bailar y darlo todo en la pista o simplemente ir de copas y charlar con nuestros amigos. Buscar experiencias increíbles en bares temáticos, o atrevernos a hacer una escape room nocturna de madrugada. Madrid es una ciudad tan gigantesca y llena de gente que siempre hay opciones para todos los gustos. La seguridad en estos garitos suele ser bastante buena, y al contrario de lo que ocurre en otras grandes ciudades, las opciones en Madrid están muy repartidas. Dará igual el barrio en el que estemos, siempre habrá un local cerca que nos llame la atención, porque al final toda la ciudad está llena de sitios brutales. Muchos aseguran que Madrid no es una ciudad tan histórica o monumental como otras del país, y que por eso solo se visita para los musicales o grandes eventos. Una vuelta por la zona del Madrid de los Austrias nos quitará rápidamente esa idea de la cabeza. Pero aun si fuera así, recorrer barrios como Malasaña, La Latina o Chueca ya da para vivir un montón de aventuras, más allá de nuestro interés histórico o cultural. En Madrid uno siempre va a pasárselo bien, si sabe lo que está buscando, claro está…